El Mind Tricks de esta semana vuelve a poner la vista en Apple tras el anuncio de Vision Pro. Esta vez me subo a hombros de gigantes para comentar las opiniones a favor, las opiniones en contra y lo que para mi es aún más interesante: un análisis de cómo Apple crea la narrativa en torno a sus productos.
Además encontrarás lecturas sobre lo que se juega Microsoft en los juzgados, los trabajos que generan las IAs, cómo construir marcas en digital y la ilusión de la decadencia moral. Y en mi obsesión de la semana, los problemas de la libertad total
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La visión de Apple
Se han escrito ríos de tinta sobre el nuevo producto de Apple, y con razón. Su lanzamiento supone una enorme apuesta por parte de la marca como no se ha visto en más de una década. Es verdad que desde el lanzamiento del iPad en 2010 han llegado el Apple Watch y los Airpods, dos productos con un éxito abrumador que han supuesto una lluvia de ingresos para la compañía que dirige Tim Cook. De hecho juntos (y sumando el resto de Wearebles más nicho) han supuesto en 2022 unos ingresos superiores a toda la división de ordenadores.
Pero este nuevo dispositivo es algo diferente y seguramente una de las razones sea el precio: 3.500 euros está al alcance de muy pocos. Por si no estás muy familiarizado con el precio de este tipo de productos, su competencia más directa son las Meta Quest, que oscilan entre 300 y 500 euros. De ahí que Mark Zuckerberg tardase apenas unas horas en apuntar que su producto es considerablemente más barato.
¿Cuales han sido las reacciones ante el nuevo producto? Empecemos por las positivas. Ben Thompson, autor de Stratechery, suele ser bastante objetivo cuando habla de tecnología y ha quedado bastante impresionado con las Vision Pro. En su completo análisis sobre el producto y sus posibilidades, Ben afirma que al probarlo sus altas expectativas han sido superadas con creces. Es interesante el potencial que vislumbra para este dispositivo, que puede ser sintetizado en esta imagen.
Ben argumenta que las Vision Pro pueden ser un sustituto de los dispositivos más “fijos” de Apple (iPad, Mac) y estar orientado hacia el consumo de contenido y la productividad. Aquí es donde uno de los principales defectos del producto, su poca duración de batería, no supone un problema tan grave. En su presentación, Apple apuntó que una experiencia de “realidad aumentada” al ver deporte o cine puede ser uno de los usos clave de este producto. Algo que encaja con la estrategia global de la marca en promover su división de contenido / servicios, y está en línea con otra de las grandes apuestas de Apple: la reciente compra de los derechos de la liga estadounidense de fútbol (MLS) por 10 años. Y sí, la llegada de Messi a esta liga no hace más que revalorizar esta inversión.
Por otro lado tenemos las opiniones negativas. Un simple fragmento de vídeo de una entrevista al mismísimo Steve Jobs sirve para resumir una de las más importantes: los dispositivos que tapan tu cara quedan horribles y difícilmente conseguirás una cita con alguien si los llevas puestos. Scott Galloway profundiza en esta idea en su blog, siempre a su modo directo y sin filtros.
”Ningún producto que te tape la cara logrará una adopción masiva. Los motivos están arraigados profundamente en nuestro ADN. Somos muy exigentes con lo que nos ponemos en la cara, ya que debe mejorar, no perjudicar, nuestra capacidad de reafirmarnos, atraer parejas y establecer conexiones. Las joyas indican riqueza y poder. La industria cosmética nos ayuda a imitar las señales visuales para la salud y la fertilidad reproductiva. No existe una versión de visor o gafas que nos haga parecer más atractivos.”
Muchos críticos con Vision Pro han señalado este punto de otra manera: ha sido muy comentado el hecho de que ningún directivo de Apple tiene fotos utilizando el producto, algo que ha ocurrido en todas las presentaciones de nuevos productos de la marca a lo largo de su historia.
Por otro lado, Scott también explica que Vision Pro es un producto nacido en la era de la pandemia, donde todos estábamos encerrados en casa solos. Su uso parece llevarte de nuevo a aislarte del resto y poner una barrera entre tú y los demás. El fragmento del vídeo de la presentación donde un padre que lleva puestas las gafas graba a sus hijas para ver después ver el vídeo a solas, ha sido ampliamente criticado por ese motivo. El propio Ben Thompson argumenta esto mismo en su blog.
“El arco de la tecnología, en gran parte liderado por Apple, tiende a que las experiencias sean cada vez más personales, y no estoy seguro de que sea un accidente que esa tendencia esté ocurriendo al mismo tiempo que la tendencia en toda la sociedad es alejarse de la formación de familias y dirigirse a un aumento de la soledad.”
Como ves, Vision Pro ha despertado una reacción bastante polarizada, por lo que es complicado saber el recorrido que tendrá este nuevo dispositivo. Por un lado es difícil apostar contra un producto de Apple tras su historial de éxito tras éxito. Pero por otro lado, también es difícil creer que un producto con un precio tan elevado vaya a tener una adopción masiva cuando productos similares mucho más baratos no la están teniendo.
Pero más allá del éxito o fracaso del nuevo juguete de Apple, me quedo con este fantástico vídeo de Marques Brownlee donde analiza cómo Apple ha construido la presentación de este producto.
La marca ha sido muy cuidadosa en alejarse de conceptos como Metaverso, Realidad Virtual o Inteligencia Artificial y no los ha mencionado una sola vez en su presentación. El objetivo es doble: primero, no asociarse con ninguno de ellos porque todos tienen aspectos negativos que pueden “manchar” a la marca. Segundo, crear su propio lenguaje y universo, para que ningún otro producto de la competencia pueda compararse a su nuevo dispositivo. Algo muy inteligente teniendo en cuenta su elevado precio. En definitiva, es verdad que Vision Pro no ha gustado a todo el mundo y despierta dudas, pero es igual de cierto que Apple sigue siendo una marca única a la hora de construir la narrativa en torno a sus productos.
1) Microsoft se la juega en los juzgados
Cuando Microsoft anunció su multimillonario intento de compra de Activision Blizzard, dediqué un Mind Tricks a sus consecuencias y comenté que la compañía se acercaba peligrosamente al monopolio en el mundo del videojuego. La FTC, el organismo estadounidense encargado de regular este tipo de prácticas anti-competencia, opina algo similar y por eso está intentando detener por todos los medios posibles esta adquisición. Esta semana Microsoft tendrá que defenderse en los juzgados para conseguir que su ansiada compra salga adelante. Hay mucho en juego, y en The Verge están haciendo una cobertura fantástica de todo lo que sucede.
“Si la FTC no consigue esta orden judicial, es probable que Microsoft consiga cerrar el trato, y la FTC se enfrentaría a una batalla realmente difícil para deshacer la fusión y seguramente se retiraría del caso. Por el contrario, si tiene éxito, Microsoft no llegaría a la fecha límite del acuerdo del 18 de julio, lo que le obligaría a renegociar los términos de compra con Activision Blizzard y restablecer la fecha de cierre. En la práctica, Microsoft probablemente se vería obligado a abandonar este acuerdo y pagar 3 mil millones a Activision Blizzard en compensación por la ruptura.”
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2) La Inteligencia Artificial y el trabajo que genera
Una parte importante de la respuesta pública a los modelos de lenguaje como ChatGPT se ha centrado en todos los trabajos que parecen abocados a la desaparición debido a su existencia. Pero poca gente habla sobre el tipo de trabajo que generan: por ejemplo, el gran número de personas que cobran por etiquetar los datos para entrenar a las IAs. Este trabajo, extremadamente repetitivo, aburrido y sorprendentemente secreto, se realiza en países como Kenia, Nepal o Filipinas. New York Magazine ha llevado a cabo un reportaje sobre las personas que trabajan en ello y ofrece una visión alternativa sobre el tipo de trabajo que generarán las IAs en un futuro.
“La IA no reemplaza el trabajo, pero sí cambia la forma en la que se organiza. (…) Las preocupaciones sobre la disrupción impulsada por la IA a menudo se contrarrestan con el argumento de que la IA automatiza las tareas, no los trabajos, y que estas tareas serán las aburridas, dejando que las personas realicen un trabajo más satisfactorio y humano. Pero es igual de probable que el surgimiento de la IA se parezca a tecnologías pasadas que ahorraron trabajo, como el teléfono o la máquina de escribir, que vencieron la monotonía de la entrega de mensajes y la escritura a mano, pero generaron tantos nuevos correos, anuncios y papeleo que las nuevas oficinas requerían nuevos tipos de trabajadores (oficinistas, contables, mecanógrafos) para gestionarlos. Cuando la IA venga a por tu trabajo, es posible que no lo pierdas, pero puede volverse más extraño, más solitario y más tedioso.”
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3) Construir marcas en digital
Tom Roach escribe en Marketing Week sobre las posibilidades que ofrecen los medios digitales para construir marcas. Lo hace respondiendo al escepticismo que llevan años generando y sobre el que he escrito recientemente por aquí. Tom señala, basándose en diferentes estudios del sector, como la clave de la construcción de marca sigue estando en el vídeo y como mientras el digital sea capaz de proporcionarlo, se puede conseguir.
“Donde hay video, hay construcción de marca. El video para construir marcas es lo que el agua significa para la vida en la tierra. Más contenido video significa más atención, más impacto emocional y, a veces, una experiencia de visualización más personalizada y con más implicación que en pantallas más grandes y públicas. Todo ello significa más codificación de memoria de marca a largo plazo, que es lo que se necesita para contribuir a las ventas del mañana, no solo a las ventas de hoy. Básicamente, construcción de marca”.
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4) Un cambio importante en la forma de estudiar a las generaciones
Recientemente he escrito sobre la falta de rigor que suelen tener los estudios generacionales que se aplican en el día a día del trabajo de marketing y publicidad. Por eso es tan importante este anuncio de Pew Research, un centro de investigación de referencia en el sector, que ofrece estudios sobre problemáticas, actitudes y tendencias en la población. Hace unas semanas los responsables del centro explicaron que van a cambiar su forma de estudiar las generaciones, para ser más rigurosos y coherentes. Un paso que les honra, que hará su trabajo mucho más interesante y que ojalá se extienda a otros centros de investigación.
“Solo haremos un análisis generacional cuando tengamos datos históricos que nos permitan comparar generaciones en etapas similares de la vida. Al comparar generaciones, es crucial controlar la edad. En otras palabras, los investigadores deben observar cada generación en un punto similar del ciclo de vida. Al hacer este tipo de investigación, la pregunta no es si los jóvenes de hoy son diferentes a los adultos de mediana edad o a los mayores. La pregunta es si los jóvenes de hoy son diferentes a los jóvenes en algún momento específico del pasado”.
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5) La ilusión de la decadencia moral
“La gente de hoy en día es menos amable que en el pasado y va a peor”. Seguramente has oído alguna vez afirmaciones similares, y puede que incluso pienses que es cierto. Mastroianni y Gilbert han publicado un fantástico estudio en Nature que explica porqué no es verdad que se esté produciendo una decadencia moral, las razones por las que aún así mucha gente cree que es cierto y las consecuencias que esta ilusión tiene en la sociedad. Spoiler de los motivos: en nuestro día a día tendemos a fijarnos más en lo negativo que en lo positivo (y los medios refuerzan este sesgo) y en cambio respecto al pasado tendemos a olvidar lo negativo y quedarnos con lo positivo.
“La ilusión del declive moral puede ser una de las razones por las que las personas no estén tan inclinadas como podrían a recurrir a la bondad de los extraños, un acto que bien podría mejorar la ilusión misma. La ilusión del declive moral también puede dejar a las personas peligrosamente susceptibles a la manipulación por parte de personas con mala fe. (…) Si la baja moralidad es motivo de preocupación, entonces el declive de la moralidad puede suponer una llamada a las armas, y los líderes que prometen detener esa decadencia ilusoria ("Make America great again”) pueden tener un atractivo enorme.”
Los problemas de la libertad total
Con más de 10 millones de unidades vendidas en sus primeros tres días en el mercado, Zelda Tears of the Kingdom se ha convertido en un éxito rotundo para Nintendo. A esta avalancha de ventas ha ayudado mucho la anterior entrega de la saga para Switch, Zelda Breath of The Wild, que fue unánimemente aclamada por crítica y público.
Uno de los elementos más alabados de ambos videojuegos es el mundo abierto que propone, donde el jugador tiene libertad total para explorar sin que tenga que seguir un camino establecido. Diseñar este mundo abierto fue un auténtico quebradero de cabeza para sus creadores, que se enfrentaron a un dilema muy difícil de resolver: ¿Cómo ofreces una libertad absoluta al jugador mientras consigues que avance por la historia del juego?
En el fantástico canal Game Maker's Toolkit han hecho un vídeo explicando el proceso y la solución a este complicado problema.
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Diseño: David Núñez